Parecia que era interminable. Montañas, oscuridad, un camino sin fin. El agotamiento te quiere pasar por encima. La sed parece que no hubiese con que ganarle. Las piernas se emploman. La cabeza ya no piensa igual. Furia contra la nada, bronca, delirio. La sed te mata mas. El cansancio te aplasta. Y la meta no aparece. Ultimos kilometros. La gente parece que te empuja con sus gritos, sus aplausos, los niños diciendo "dale, dale", familias que gritan "vamos, queda poco". Y pienso: no puedo mas. Pero al final puedo mucho mas. Las sirenas suenan. Ah, estoy cerca de la llegada. Pero donde esta? Corro, corro..... derrepente, se vislumbra un cartel que parece ser la meta. Pero solo parece porque antes, muchas cosas parecieron ser la meta. Finalmente, esta vez parece que si es. Ahi esta: LLEGADA. Y una botellita de agua de 500ml en la mano de un señor que solo atino a abrirla y derramarla entera sobre mi boca seca y cuarteada. La botellita de la salvacion!!! Comienzo a entender que todo ese inevitable dolor durante la carrera tiene su sentido. Que sin lugar a dudas es una emocion inmensa y dificil de explicar. ¿Que tiene de lindo sufrir durante la carrera? No se supone que deberia ser divertido? Es el secreto del corredor!!!!! Algo que solo aquellos que corren y corren conocen la explicacion!!!!!


Christian Yic (etapa 9).